Humanizar una marca es una estrategia clave en la construcción de una BUENA REPUTACIÓN pero ¿sabes qué necesitas para lograrlo?
Cuando se habla de “humanizar una marca” es mucho el contenido que se encuentran muchos consejos sobre “cómo acercarte a tu audiencia”, cuando lo cierto es que se trata de una estrategia mucho más profunda.
A mis consultorías han llegado muchos clientes interesados en hacer más humanas sus marcas (personales o de las empresas), pero sin estar claros de cuál es el camino más adecuado para lograrlo y con la creencia frecuente de que necesitan casi “salir bailando” en un Reel para lograrlo.
Lo cierto es que humanizar una marca va más allá de seguir tendencias o mostrar “tu vida en todas las perspectivas a nivel personal”.
Se trata de una estrategia que desde la coherencia y la consistencia busca maneras de escuchar y conectar en el mundo que la rodea, mientras le hace honor su propuesta de valor.
Se debe entender que humanizar una marca necesita de la puesta en marcha distintas estrategias para acercarse al mundo desde la empatía y la ética.
Pero ¿qué se necesita para humanizar una marca?
Así como anteriormente comentamos que para humanizar una marca se necesitan distintas estrategias para conectar con la audiencia, es importante entender que este proceso no solo incluye a los clientes.
Una parte importante en el proceso de humanizar una marca es su cultura organizacional y cómo lo que profesa está en sintonía con lo que hace.
De ahí que clientes, empleados, aliados y stakeholders sean igual de importantes en el proceso de humanizar una marca y la razón para que cada estrategia para lograrlo sea distinta.
En mi experiencia,he aprendido que la escucha activa y la comunicación asertiva son fundamentales para una parte de la ecuación: estar atentos a las necesidades de las personas que hacen vida con la marca y cómo la propuesta de valor ayuda a satisfacerlas.
Se debe entender que es un proceso crucial que afecta de manera transversal la imagen y la reputación de marca. De ahí que sea tan importante que la coherencia y la consistencia estén presentes en todo momento..
Para explicarlo de otro modo, imaginemos dos marcas con audiencias totalmente distintas: una influencer de lifestyle y una abogada experta en inmigración.
A pesar de que ambas marcas puedan tener algunos puntos en común entre sus audiencias como: muchas son madres o mujeres entre ciertas edades, las necesidades de cada una son distintas desde el punto de vista sus públicos objetivos.
Ahora, puede que para la influencer de lifestyle mostrar su casa y su vida cotidiana entre en sintonía perfecta con lo que su público quiere ver, pero si no está respaldado en su propuesta de valor y la cultura tras su marca para no perder credibilidad.
En el caso de la experta en inmigración puede que su apuesta más acertada de contenido sea el utilitario, en el que trata de educar y compartir su experiencia con su audiencia, para construir una imagen confiable y transparente.
Ambos casos tienen en común que sus estrategias deben ser coherentes y consistentes con cada una para lograr resultados que perduren en el tiempo y que ayuden a construir una buena reputación.
¿Quieres saber más sobre cómo humanizar una marca?¡Escríbeme a anak@anakcardenasl.com y conversemos!